Frikiplanet

Es acojonante. Inexplicable. Uno de los grandes misterios del universo. Vamos a ver, o sea que Dios me otorga una belleza y un atractivo físico sin parangón alguno -l@s que me conocéis no podréis negar este hecho empírico de la naturaleza- y en vez de aprovecharlo para cortejar a la hembra en celo que habita la sabana salvaje, lo utilizo para atraer zumbados, frikis, colgaos y personajes dignos de mentar a la Madre Teresa. Más con pena que con devoción...

Y es que lo prometí hace tiempo en Marte en Libra -los que me leíais hace un par de años igual sí lo recordáis- y lo vuelvo a hacer desde If: voy a hacer una enciclopedia descriptiva de los personajes infames que me he dedicado- y me dedico- a conocer durante las noches de borrachera indescriptible. Para indescriptibles los piezas con los que acabo compartiendo poco más que las últimas risas de cada velada etílica. El jueves de la semana pasada, en Malonie's, un supuesto Legionario suicida más zumbado que las maracas de Machín. Esta noche, hace apenas una hora, un tal Mister Crown, julandroide absoluto cubata en mano por la calle, haciendo eses por Plaza España y al cual he tenido que salvar de una previsible paliza por parte del novio de la jamba a la cual le ha gritado 80 barbaridades. Vaya angelito, el colega.

Yo ya no sé como lo hago, coño. La de gentuza que uno puede encontrarse por Madrid entre 6 y 8 de la mañana... Entre Ivan el Sicario, Andrés el mendigo polaco hombre-lobo, Patxi el putero, el brasileiro loco de Ulan Bator, el indigente devoto de Juan Pablo II, la yonki del "No dejes que me atropellen mamá" y Marfial "acústica con percusión" de la casa de los horrores, uno ya no sabe que hacer. Yo, ante tal elenco de personajes lamentables, una de dos: o pinto un cuadro estilo surrealista al cuadrado, o monto un circo. O las dos cosas. Joder, vaya fauna...

Por cierto, que hoy es 26. A ver qué pasa.